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jueves, 19 de junio de 2014

una especie de realismo






FRANCK MAUBERT: Así que [antes de dedicarse a la pintura] diseñaba muebles, sillas, mesas, alfombras, espejos... ¿Se pueden ver en algún sitio?

FRANCIS BACON: Quizá en Alemania, no sé muy bien dónde; se los llevaron durante la guerra... Una mujer alemana lo compró todo.

F.M.: ¿De qué estilo era aquel mobiliario?

F.B.: Se parecía más que nada a los muebles cromados de Le Corbusier y de Charlotte Perriand. En aquella época su trabajo me parecía interesante. Yo diseñaba mesas, escritorios, sillones con ese espíritu, y hasta me había comprado una de aquellas sillas, que me gustaba como escultura. Pero como silla no era nada cómoda, en absoluto. Eran objetos bellos, muy "clínicos".

F.M.: ¿De ahí le viene el gusto por lo que usted llama una pintura "clínica"?

F.B.: Yo quería hacer una pintura "clínica" en mi opinión, ¿comprende? Los objetos de arte más grandes son "clínicos".

F.M.: ¿Podría precisar ese término, por favor?

F.B.: En inglés se dice clinical. De modo que cuando empleo la palabra "clínico" quiero decir el realismo más total. Como hoy día es imposible de definir, es imposible hablar de él.

F.M.: Clínico ¿es algo frío, distante?

F.B.: Una especie de realismo, pero no tiene por qué ser frío. Ser "clínico" no es ser frío, es una actitud, es como cercenar alguna cosa. Pero es verdad que todo eso está relacionado con la frialdad y la distancia. A priori, no hay sentimientos. Pero, paradójicamente, puede provocar un enorme sentimiento. "Clínico" es estar lo más cerca posible del realismo, en lo más profundo de uno. Algo exacto y tajante. El realismo es algo que te turba...

F.M.: ¿Una relación directa entre su vida y su pintura quizá?

F.B.: Sí, sin la menor duda lo primero es trabajar sobre uno mismo... Yo querría lograr una pintura "clínica", en el sentido en que Macbeth es clínica. Los grandes poetas son unos formidables activadores de imágenes. Sus palabras me resultan indispensables, me estimulan, me abren las puertas del imaginario (...). Los poetas me ayudan. A pintar, sí, y sobre todo a vivir. Shakespeare puede decir cosas muy agudas... Pero, a veces, hay demasiada palabrería, muchos vuelos líricos. Me gusta, por encima de todo, Macbeth... Nada más terrorífico, más horrible que Macbeth. Es un concentrado del mal.





F.M.: Entonces, el verdadero disparador ["el que le suscitó las ganas de pintar"], ¿cuál fue?

F.B.: Más adelante, en Londres, hubo otro "disparador", como dice usted, ante el mostrador de la sección de carnicería de Harrods, los grandes almacenes. No se sabe por qué te emocionan ciertas cosas. Es verdad, adoro los rojos, los azules, los amarillos, la grasa de la carne. Somos de carne, ¿no? Cuando voy a la carnicería siempre me parece sorprendente no estar allí, en el sitio de los trozos de carne. Y luego, hay un verso de Esquilo que atormenta mi espíritu: "El olor a sangre humana no se me quita de los ojos"...

Se interrumpe, alza los ojos al techo y después continúa.

La carne ha impresionado de verdad todos mis instintos. Fue un choque visual. Magníficamente visual. Me dije, mira, se podría hacer algo con todas esas cosas que te emocionan. De vez en cuando hay algo que nace de ahí y se convierte en un material de trabajo. Y yo me lo he apropiado. Era algo que me venía muy bien. 

F.M.: La carne forma parte de la historia de la pintura desde hace mucho tiempo. De todas formas, ¿no conocía a Rembrandt, por ejemplo, antes de experimentar esas emociones?

F.B.: No. Y no se trataba de una emoción estética, ya que nuestras emociones raramente son estéticas... Era Rembrandt el que decía: "Echaos para atrás: el olor de la pintura no es sano".




F.M.: Dalí decía que ante las pinturas de Velázquez se veía hasta qué punto uno es una nulidad.

Se incorpora.

F.B.: Hablamos de pintura, ¿no? No me gusta demasiado la grandilocuencia de Dalí. Pero, respecto a lo que dijo de Velázquez, tengo que darle la razón. Un artista lo absorbe todo. ¿Qué artista no está influido por otro? Tomas de otro lo que puedes si te hace falta, Todos los pintores hablan de otro pintor y a veces roban cosas de otro. Es necesario intentar ir más allá. Yo lo probé con mis variaciones en torno al retrato del papa Inocencio X, en los años cincuenta, pero no estoy contento de esos papas.

F.M.: ¿Había visto el cuadro de Velázquez antes de emprender su serie?

F.B.: Solo en reproducciones, y ¡en blanco y negro! La idea de un papa en movimiento me vino de la acción. Cuando doy la primera pincelada sobre la tela, no sé adónde voy. (...) Al principio me interesé en la boca, solo la boca. Todo el interior, sus formas y sus colores. Tenía aquel libro sobre las enfermedades de la boca y quería tratarla como una puesta de sol de Monet. El asunto fracasó, por supuesto. Quizá algún día lo consiga...




F.M.: Sabemos que usted es uno de los pintores vivos mejor cotizados, y cuando se pronuncia su nombre la gente se pregunta enseguida qué hace usted con su dinero. Y aún se lo puede preguntar uno más cuando ve la gran austeridad con la que vive y trabaja. ¿Qué hace con el dinero?

Francis Bacon, como tantas veces, se ríe a carcajadas y barre la superficie de la mesa con el revés de la mano.


F.B.: ¡Ah, el dinero! ¡Mi dinero! El dinero, ¿sabe usted?, me importa un bledo. ¡No me dedico a la pintura por dinero! Doy bastante. La mayor parte de lo que gano es para mi hermana y para uno de mis amigos más queridos. (Risas) Mi hermana es nueve años menor que yo y vive en Sudáfrica. Y pago impuestos, ¿sabe? Me quitan más de la mitad de lo que gano, pero me importa un bledo. No me parece escandaloso. Hay que ayudar a los hospitales, por ejemplo. Ahora los servicios de salud están cambiando...

F.M.: Dicen que a veces reparte fajos de billetes entre desconocidos, por la calle, de noche...

F.B.: ¿Quién le ha contado eso? Sí, es verdad, ha ocurrido alguna vez, por la noche, en la calle... ¿Qué importancia tiene?

F.M.: De todas formas, con su dinero ayuda también a personas cercanas en dificultades, es generoso...

Se inclina ligeramente de hombros.

F.B.: El dinero es para gastarlo, ¿no cree?





F.M.: De manera que el dinero no le interesa.

F.B.: ¡Claro que sí! ¡Sí, me gusta el dinero! Pero yo no tengo necesidades, invito a los amigos, viajo de vez en cuando. Tengo muy pocos gastos. Me gusta ir a buenos restaurantes. Y comprar ropa, también...

F.M.: ¿Ropa? Pero si casi siempre lleva las mismas camisas y la misma cazadora.

F.B.: ¿De verdad? (Risas). Cuando uno envejece se vuelve tan espantoso que hay que compensarlo con la ropa. La ropa ayuda. El dinero sirve para tener una vida menos imposible.

F.M.: Se encuentra espantoso, pero aun así se ha representado bastante. Todos esos autorretratos...

F.B.: Soy viejo y feo. Y detesto mi cara, igual que me resulta penoso oír mi voz. Es espantosa. Lo mismo que ver fotos de mí mismo. Cuando hacía autorretratos era porque en aquel momento no tenía nadie más a quien pintar. ¿Sabe usted?, Franck, he perdido muchos amigos. Prefiero a la gente guapa. La juventud lo es todo.

F.M.: De todos modos, tortura usted la belleza.

F.B.: Me gustan las heridas, los accidentes, todo aquello donde la realidad abandona sus fantasmas... (Risas). Pero bueno, la fealdad puede ser interesante y fascinante, ¿no?









jueves, 15 de marzo de 2012

(homenaje a) Unica Zürn



Ella no logra decir ‘yo’, tampoco unir las cuatro líneas de un cuadrado como el médico le ordena. Ni abandonar la dicha de trazar una mujer cuya boca sonríe entre sus mismas piernas; está el problema de los dientes, encajarlos dentro de su cabeza o de su sexo. Así que los dibuja fuera. Se toca un poco las encías. Piensa: mis pensamientos son apócrifos. La frase se retuerce, engendra impresionante cosmos, siamés inconformista y ósmosis pasmosa. ‘Firme aquí’, le dicen. Se ve a sí misma escribir: mi nombre es látigo, y sus palabras ríen, deshacen y componen un tejido inagotable, hacen el amor consigo mismas: libero magnetismo – ágilmente sombrío – bimetalismo negro – gelatinoso mimbre – símbolo emigrante. Transforma su locura imaginaria en irracional amiga, o mala irrigación. ¿Y si el papel en blanco es ella misma, la blancura transparente de su torso que deja ver arterias, capilares, finísimas ramificaciones como un bosque de lenguaje que se agita al respirar? El médico murmura: esta mujer es peligrosa, está radicalmente viva.





(imágenes: Unica Zürn)

(texto: R.M.)



miércoles, 24 de agosto de 2011

laberinto




No habrá nunca una puerta. Estás adentro
y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
de interminable piedra entretejida.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
en el negro crepúsculo la fiera.







(Jorge Luis Borges, Elogio de la sombra)

domingo, 28 de noviembre de 2010

la condición humana


mazzy star-into dust

.

.

.

Aún en la caída

sin aliento y otra vez

dentro 

hoy

dentro de mí hoy

casi partida en dos

hasta que tus ojos se deshagan

en polvo

como dos extraños reducidos a polvo

hasta que mi mano tiemble por el peso del miedo

...

Eras tú

sin aliento y desgarrado

pude sentir mis ojos convertirse en polvo

en dos extraños

reducidos a polvo

reducidos a polvo

.

.

Still falling

Breathless and on again 

Inside today 
Inside me today 
Around broken in two 
Til your eyes shed into dust 
Like two strangers turning into dust 

Til my hand shook with the weight of fear 

...


It was you, breathless and torn 
I could feel my eyes turning into dust 
Into strangers, turning into dust 
Turning into dust 
Turning into dust

(Mazzy StarInto Dust)

martes, 9 de noviembre de 2010

usura


Con Usura

Con usura ningún hombre tendrá casa de buena piedra

con todas las piedras pulidas y encajadas

con un diseño que oculte sus facciones,

con usura

no hay un paraíso pintado para el hombre en el muro de su iglesia

harpes et lutz

ni lugar donde la virgen reciba el mensaje

y el halo se proyecte desde una incisión,

con usura

nadie verá a Gonzaga ni al los suyos ni a sus concubinas

ninguna pintura se hace para que perdure o se viva con ella

sino para que sea vendida y rápido

con usura, pecado contra natura,

tu pan está hecho de harapos

tu pan está seco como el papel,

sin trigo de montaña ni robusta harina

con usura la línea se engrosa

con usura no hay fronteras evidentes

y ningún hombre encuentra un lugar donde habitar.

Al cantero se le despoja de su piedra

al hilandero se le aparta de su tela

.

CON USURA

la lana no llega al mercado

la oveja no vale nada con usura

Usura es un parásito, usura

deja roma la aguja en manos de la doncella

y detiene la destreza del que hila.

A Pietro Lombardo

no lo trajo la usura

ni a Duccio lo trajo la usura

ni a Piero della Francesca; Juan Bellini no existió por usura

ni se pintó por ella "La Calumnia".

Por usura no apareció Angelico; no apareció Ambrosio Praedis,

ni iglesia alguna con la inscripción en piedra: Adán me hizo.

No por usura Saint Trophime

no por usura Saint Hillaire,

usura carga el cincel de herrumbre,

oxida al arte y al artesano,

corroe el hilo dentro del telar

ninguna aprende a tejer oro en sus diseños;

el azur tiene gangrena con usura, la tela no se borda

la esmeralda no encuentra a ningún Memling

Usura mata al niño en el interior del útero

impide que el joven haga cortejo

trae la parálisis al lecho, se acuesta

entre la recién casada y su marido

CONTRA NATURAM

han traído putas para Eleusis

los cadáveres se sientan al banquete

por orden de la usura. 

.

.

.

With Usura

With usura hath no man a house of good stone
each block cut smooth and well fitting
that design might cover their face,
with usura
hath no man a painted paradise on his church wall
harpes et luthes
or where virgin receiveth message
and halo projects from incision,
with usura
seeth no man Gonzaga his heirs and his concubines
no picture is made to endure nor to live with
but it is made to sell and sell quickly
with usura sin against nature,
is thy bread ever more of stale rags
is thy bread dry as paper,
with no mountain wheat, no strong flour
with usura the line grows thick
with usura is no clear demarcation
and no man can find site for his dwelling.
Stone cutter is kept from his stone
weaver is kept from his loom

WITH USURA
wool comes not to market
sheep bringeth no gain with usura
Usura is a murrain, usura
blunteth the needle in the maid's hand
and stoppeth the spinner's cunning.
Pietro Lombardo
came not by usura
Duccio came not by usura
nor Pier della Francesca; Zuan Bellin' not by usura
nor was "La Calunnia" painted.
Came not by usura Angelico; came not Ambrogio Praedis,
Came no church of cut stone signed: Adamo me fecit.
Not by usura St Trophime
Not by usura Saint Hilaire,
Usura rusteth the chisel
It rusteth the craft and the craftsman
It gnaweth the thread in the loom
None learneth to weave gold in her pattern;
Azure hath a canker by usura; cramoisi is unbroiled
Emerald findeth no Memling
Usura slayeth the child in the womb
It stayeth the young man's courting
It hath brought palsey to bed, lyeth
between the young bride and her bridegroom

CONTRA NATURAM
They have brought whores for Eleusis
Corpses are set to banquet
at behest of usura.


(Ezra Pound, Canto XLV; trad.: R.M.)

jueves, 27 de agosto de 2009

osip mandelstam: "versos del soldado desconocido" (fragmentos)





(1.)




Que este aire sea testigo
de su corazón de largo alcance,
y en las trincheras, un omnívoro y activo
océano sin ventana es la materia...


¿De qué sirven estas estrellas delatoras?
Todo deben escrutar. ¿Para qué?
En la reprobación del juez y del testigo,
en un océano sin ventana, está la materia.



Recuerda la lluvia, rudo sembrador
—su anónimo maná—,
cómo bosques de crucecitas señalaban
al océano o cuña militar.


Habrá gente débil y fría
que matará, sentirá hambre y frío
y en una célebre tumba
yacerá el soldado desconocido.


Enséñame, débil golondrina
que has desaprendido a volar,
cómo dominar esta tumba aérea
sin timón y sin alas.



Y de Lérmontov, Mijail
te entregaré un severo informe
de cómo la bóveda enseña a la tumba
y una fosa de aire imanta.













(2.)


Con temblorosos racimos de uva
nos amenazan estos mundos,
y de ciudades furtivas,
dorados lapsus, delaciones,
bayas de hielo tóxico, penden
las elásticas tiendas de campaña de las constelaciones,
los dorados sebos de las constelaciones...











(3.)




Mezcla arábiga, picadillo,
luz pulverizada por la velocidad del rayo.
Con sus suelas oblicuas
permanece el rayo en mi retina.


Millones de muertos de saldo
abrieron una senda en el vacío:
¡Buenas noches! Le desean
lo mejor las enterradas fortalezas.


Incorruptible cielo atrincherado,
cielo de multitud de muertes al por mayor,
por ti, lejos de ti, íntegro,
llevo mis labios a las tinieblas.


Por maltrechos cráteres,
terraplenes, desprendimientos,
demoraba y abrumaba:
El sombrío, virulento y
humillado genio de las tumbas.









(5.)




¿Para qué debe crecer el cráneo
por toda la frente —de sien a sien—?
¿Para que en sus queridas órbitas
puedan penetrar las tropas?
En vida crece el cráneo
por toda la frente —de sien a sien—,
Se atormenta por la nitidez de sus suturas,
se aclara con la cúpula del entendimiento,
espumea con el pensamiento, se sueña.
Cáliz de cálices y patria de patrias,
cofia recamada de pespuntes de estrellas,
gorrito de la felicidad —padre de Shakespeare...












(7.)



Vierten sangre las aortas,
y en las filas, un susurro resuena:
Yo nací en el noventa y cuatro,
yo nací en el noventa y dos...
Y apretando en el puño el triturado
año de nacimiento, en tropel, con la manada,
cubierta la boca de sangre, susurro:
—Yo nací en la noche del dos al tres
de enero del noventa y uno,
año sin esperanza, y los siglos
me rodean con el fuego.



(2 de marzo de 1937 - 1938. traducción: J.G.Gabaldón)








Osip Mandelstam (1891-1938)